La reforma de una vivienda no solo busca renovar su estética, sino también mejorar la funcionalidad y crear espacios que reflejen personalidad. En este proyecto, el reto era combinar la pureza del estilo minimalista con la calidez de lo vintage, logrando un hogar elegante, acogedor y atemporal.
Para poder combinar estos dos estilos, se optó por unos acabados uniformes, el blanco perla y roble natural. Esta combinación aporta una base neutra sobre la que destacan elementos vintage y con historia para dar protagonismo a los detalles, sin sobrecargar el espacio.
Uno de los espacios más importantes de la vivienda es la cocina. Esta se ha diseñado bajo un concepto abierto y funcional, comunicando con el salón aportando una mayor relación con los invitados en comidas y cenas, la elección de los acabados refuerza la sensación de limpieza y amplitud. El diseño de la cocina en gola ofrece una estética lineal, mientras que la encimera Inalco Silk Blanco Natural y la isla central invitan a disfrutar del espacio de forma cómoda y práctica.
El contraste se introduce de forma sutil a través de pequeños detalles como los estantes en roble natural, que rompen con la homogeneidad del blanco y permiten exhibir piezas decorativas con carácter. Los electrodomésticos en negro y el grifo en acabado mate, aportan un toque de sofisticación sin restar ligereza al conjunto.
En conjunto, la cocina se convierte en un espacio luminoso y sereno, donde cada elemento tiene su razón de ser.
Siguiendo la misma línea estética, los baños han sido diseñados con una combinación de tonos neutros, materiales nobles y acabados en negro mate que aportan un aire moderno y elegante.
Este primer baño destaca por su mobiliario flotante en gris ratón, la grifería en negro crea un atractivo contraste y refuerza la modernidad del espacio. Los detalles decorativos, como el pequeño jarrón con flores y el espejo sin marco, mantienen la sencillez y el equilibrio visual.
La vivienda cuenta con otros dos baños situados uno en el dormitorio principal y otro en el pasillo. Estos dos baños siguen una estética similar donde el protagonismo lo toma el roble natural, que aporta una continuidad al diseño general de toda la vivienda. El baño principal se diferencia por su lavabo en tonos tierra y líneas suaves a diferencia del secundario con lavabo de diseño más sencillo. Como en el resto de la vivienda, se han mantenido las líneas limpias y los colores neutros, permitiendo que los materiales hablen por sí solos.
Los accesorios en negro mate, como el grifo y los tiradores, ayudan a unificar el diseño y refuerzan el estilo sobrio y contemporáneo del conjunto.
El resultado de esta reforma es una vivienda que transmite equilibrio, sofisticación y calidez. Gracias a una base neutra y materiales nobles, se ha logrado un espacio funcional y atemporal, en donde incorporar pequeños detalles vintage que aporten personalidad al conjunto.
Este proyecto demuestra que el minimalismo no tiene por qué ser frío o impersonal: con la combinación adecuada de materiales y acabados, se pueden crear ambientes acogedores, elegantes y llenos de vida.
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